Como representación diplomática oficial de un gobierno extranjero en un país anfitrión, las embajadas y consulados actúan como un santuario en suelo extranjero, ofreciendo acceso a las leyes y derechos de su país de origen.
Las embajadas y consulados no sólo promueven las relaciones amistosas entre países en asuntos exteriores, sino que también apoyan a sus ciudadanos que viven o viajan al extranjero, ofreciéndoles ayuda en cuestiones legales, visados y mucho más.





